Corrupción, Referéndum y Guerra Política

El primer ministro sale a decir que el referéndum es una herramienta de negociación con el Congreso. "Si no haces las reformas, aplicó el referéndum". Un poco iluso de parte de Villanueva, considerando la historia reciente, llena de derrotas del Ejecutivo frente al Legislativo. 

Lamentablemente, por tristes razones democráticas, Fuerza Popular tiene la mayoría en el Congreso y por más castigo que se le haga, nada sugiere que ello cambiará. Incluso desde adentro, se han encargado de usar la Dura Lex de modo que nadie ose quebrantar dicha mayoría. Si incluso Keiko le cortó la cabeza a su propio hermano, que más es capaz de hacer.

Por lo tanto, esa negociación no es otra cosa que un engaña muchachos mediático. No creo que ni ellos piensen que pueden negociar a estas alturas. Son manotazos de ahogado. Ojalá resistan hasta el 2021. Aunque, un nuevo enfrentamiento del Ejecutivo contra el Legislativo, con estrategia y condiciones similares está destinado a ser una derrota más.

¿Cómo solucionar ello? Dado que el año 2020 será un año casi electoral y el 2019 un año pre-electoral es necesario que resistan hasta esta fecha. Tal vez un fortalecimiento a nivel de regiones y departamento pudiera ayudar, aunque las malas costumbres que han adquirido los gobiernos descentralizados son difíciles de corregir. 

En ese caso, el año 2019 se puede introducir un poco de inestabilidad política a través de un ataque más agresivo para reformar el Congreso. No obstante, si el pueblo aún confía en Fuerza Popular, entonces la composición del Congreso se mantendría constante.

Por ello, el lugar de estar peleando con el Congreso, tal vez el Gobierno debería encargarse de hacer cosas más tangibles para el pueblo, entendiéndose como la masa más grande de votantes. Aquellos que trabajan todo el día y sólo pueden ver televisión residual, por no decir basura. 

Las marchas ayudan, pero tienen un punto máximo. De momento que generan desorden, caos y agresión, se pierde legitimidad. Así es complejo pensar que una acción radical de esa naturaleza pueda solucionar el problema.

Tal vez otra solución pueda ser que se le de más exposición a los integrantes de Fuerza Popular. Dado que el peruano no puede con su carácter, y mucho menos un legislador acostumbrado a las malas mañas, es altamente probablemente que las continue haciendo una vez que tenga un cargo de mayor exposición. Y de este modo se pueden ir autodestruyendo uno por uno. 

Complementariamente a ello, sería recomendable desintegrarlos, es decir, hacer alguna actividad de modo que se desestabilice la situación. Lo de Kenyi no es tan util, dado que si bien podrá ir contra su hermana, no necesariamente contra el fujimorismo per se. Se necesita que las más mediáticos o voceros sean los primeros en irse, de modo que se queden sin personas de palabras. El resto fácilmente se enredará y no permitirá seguir expresando la defensa mediática del fujimorismo.